Vicky Peláez
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16:47 16/03/2012
Columna por Vicky Peláez
Tras un recuento electoral, solo importa quien es ganador. Todos los demas son perdedores (Winston Churchill).
Estamos acostumbrados a que cada cierto tiempo los paises entren en la voragine de las elecciones presidenciales donde frecuentemente los candidatos prometen lo que no pueden cumplir y los electores tratan de seleccionar a alguien cuyas promesas tengan cierto chance de hacerse realidad.
Una tarea harto dificil en este mundo interconectado, donde ademas de los partidos que habitualmente se turnan para ocupar el poder existe un sistema de medios de comunicacion al servicio del neoliberalismo globalizado cuyo poder sobre la opinion publica puede superar la capacidad convocatoria del cualquier partido existente en ausencia de la madurez ciudadana para discernir la verdad y la mentira.
Actualmente podemos observar este fenomeno en Mexico, Venezuela y Estados Unidos que se hallan en plena campana electoral. De un ejemplo de soberania e independencia para toda America Latina, Mexico se convirtio en la segunda mitad del Siglo XX en un pais sometido a la voluntad de su vecino del norte.
Cada seis anos en visperas de las elecciones presidenciales, Estados Unidos manda su enviado para evaluar la utilidad de los candidatos presidenciales para los intereses nacionales norteamericanos y decidir a quien dar su visto bueno. Asi se explica la reciente visita del vicepresidente Joe Biden a Mexico que el proximo primero de Julio elegira su nuevo lider.
Ya se puede deducir despues del encuentro de Joe Biden con los tres candidatos principales: Enrique Pena Nieto del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Josefina Vasquez Mota representando al Partido de Accion Nacional (PAN) que esta actualmente en el poder y Andres Manuel Lopez Obrador del Partido de Revolucion Democratica (PRD).
De estos el representante del PRI tiene buenos chances para recibir el apoyo mediatico globalizado y llegar al poder con la bendicion del norte.
Durante los 12 anos en el poder el PAN se ha desgastado y con su politica economica neoliberal contribuyo a la caida de Mexico en las garras del narcotrafico, la violencia y corrupcion. Las 47 mil victimas entre hombres mujeres y ninos en los ultimos seis anos son testimonios del debacle del pais.
En estas condiciones el candidato del PRI Enrique Pena Nieto, que por el momento tiene preferencia en las encuestas oficiales, representa la continuidad del mismo modelo economico neoliberal siguiendo las recetas del FMI y de las mismas politicas represivas contra el crimen organizado siguiendo el asesoramiento norteamericano.
Precisamente este enfoque persigue la prensa globalizada, iniciando una nueva guerra mediatica contra Andres Manuel Lopez Obrador (AMLO) quien perdio las elecciones presidenciales del 2006 debido a un fraude que fue comentado ampliamente. En aquel entonces ni las protestas ni las marchas de millones de personas, ni las denuncias de las organizaciones populares sirvieron para nada. El sistema decidio elegir al panista Felipe Calderon como presidente bajo la bendicion de los Estados Unidos que nunca se pronuncio sobre el fraude.
Ahora AMLO ofrece una alternativa a la continuidad de la politica actual en Mexico haciendo hincapie no en la militarizacion de la lucha contra el narcotrafico sino reorientar los programas economicos para romper el circulo de la pobreza que sirve de alimento al crimen organizado, dar la justicia a los mas pobres y crear el empleo para impulsar el crecimiento economico.
Ya no es un anti sistemico, como se perfilo en 2006, reconoce la asimetria que existe entre Estados Unidos y Mexico y no ofrece falsas expectativas con matices ideologicas. Simplemente quiere nuevo enfoque en la relacion bilateral con Norteamerica fundada sobre los principios de soberania y cooperacion de los dos paises para el desarrollo de su pais. A medida que su popularidad esta subiendo en la opinion publica, se esta intensificando la campana mediatica organizada utilizando los mismos metodos usados en 2006 para asustar a la gente del radicalismo e izquierdismo de Lopez Obrador y el posible acercamiento de Mexico a Venezuela de Hugo Chavez.
Mientras esto sucede en Mexico, la campana electoral en los Estados Unidos que culminara el 6 de Noviembre del ano en curso sigue su rutina habitual disenada por los Padres Fundadores del pais que no permite el surgimiento de algun partido alternativo a los dos unicos partidos existentes que siempre monopolizaron el poder: el Partido Democrata y el Republicano, ambos representando al gran capital que se turnan en el poder, de acuerdo a los intereses nacionales.
Cuando el Wall Street y las mega corporaciones necesitaron guerras para apoderarse de los recursos energeticos del Medio Oriente, hicieron elegir mediante un fraude en Miami reconocido por la misma prensa al republicano George W. Bush en 2000 que no perdio el tiempo para iniciar sus intervenciones militares en Afganistan e Irak de consecuencias catastroficas para el mundo entero.
Posteriormente en 2008 para hacer compartir responsabilidad de los democratas en el desastre socioeconomico en que se sumergio el pais el sistema selecciono al afro norteamericano Barack Obama para ser elegido por el Colegio Electoral como presidente para que siga la misma politica de conquista de los recursos energeticos reemplazando las guerras abiertas por intervenciones encubiertas en forma de ''caos organizado'' o ''revoluciones a colores''.
Utilizando el principio maquiavelico de que ''el fin justifica los medios", Barack Obama acelero el proceso de militarizacion de su propio pais para prevenir el descontento popular en los tiempos de una severa recesion economica. El proximo presidente, democrata o republicano hara lo mismo y los medios de comunicacion se haran de la "vista gorda" ante cualquier desviacion de los principios democraticos que tanto pregona Estados Unidos. Asi lo hicieron hace poco cuando el candidato de oposicion Ronald Ernest Paul cayo victima de un fraude en las elecciones en Maine.
En Venezuela la situacion cambia radicalmente. La guerra mediatica de la prensa globalizada es permanente y despiadada contra Hugo Chavez. Mas del 90 por ciento de los medios de comunicacion estan en manos privadas defendiendo los intereses de la oligarquia nacional identificada plenamente con Estados Unidos. Hugo Chavez es blanco preferido de sus ataques, tildandolo de comunista, populista, nacionalista, caudillo, dictador etc., etc.
Ni siquiera respetan su enfermedad no solamente anunciando su inminente muerte, sino llamando a la muerte del presidente, como lo hizo recientemente Globovision.
Sin embargo, a pesar de esta guerra mediatica, las promesas de oposicion de retornar el pais al pasado no convencen al pueblo venezolano que el 7 de Octubre proximo dara a saber su opinion durante las elecciones presidenciales igual como lo hizo el pueblo ruso recientemente.
Alli justamente, desde hace un ano el Occidente viene desatando una guerra mediatica contra Vladimir Putin por sus ideas de soberania nacional y, ademas cuenta con el apoyo de la oposicion rusa que ha recibido en los ultimos tres anos millones de dolares de los Estados Unidos, segun diversas denuncias, entre ellas la del congresista ruso Ilyas Umakhanov.
Sin embargo, una ola de protestas, que fue llamada por el organizador de la revolucion a colores en los paises balticos en 1991 Audrius Butkavichus, como ''la marcha de los abrigos mink (shubas de norka) '', no convencio al pueblo ruso que al final dio su voto de confianza a Putin.
La controversia electoral a nivel global sigue en marcha, el asunto es conocer quien mueve los hilos.
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